como me haces hablar en el silencio.


Es la mágica hora sentida del ocaso.
El monte se desangra. La luz es rubia. Yo
marcho por el sendero con aire de fracaso,
apagada la frente y rojo el corazón.

El poeta es la sombra luminosa que marcha
pretendiendo enlazar a los hombres con Dios,
sin notar que el azul es un Sueño que vive
y la Tierra otro sueño que hace tiempo murió.

El azul que miramos tiene la gran tristeza
de no presentir nunca donde su fin está,
y Dios es la tristeza suprema e imposible
pues su porqué profundo tampoco puede hablar.

El secreto de todo no existe.
Las estrellas son almas que al misterio quisieron escalar.
La esencia del misterio las hizo luz de piedra,
pero no consiguieron internarse en su Paz.







ojala que el deseo se vaya trás de ti...

2 puteadas:

Cata dijo...

Me estoy dando cuenta de que cada vez que me mandas tu blog es para que yo te deje algun comentario, y casi nunca lo hago.
Bueno, ahora lo hare..

Te quiero Gabriela (Si, Gabriela.. Yo jamas te digo asi!)

Celeste Buendía dijo...

permíteme cuestionarme y buscar relación alguna entre la poesía, la tristeza, el deseo y Jim Morrison!

Sexo, Drogas y Rock n' Roll baby!

agur!